“Asqerosoo nO recoerdo si tu cumple era eL sabado o el domiingo¬¬ proo buenO el casoo esq vngO a desearte unaz jelizidaDes atrasadaz xq de tOas formas ia es lunes i noo t feliizite haha prdOn¬¬ ((jeliicidadessss=*)) bueeenoooo compiita iaa sabez ahii stamOs pa tochoo cuiidEse aileee=)”
Tómelo como usted quiera: “aberración lingüística”, “mutación textual”, “introducción de gestos en la escritura”, “ataque total a la Real Academia Española”. Lo cierto es que Internet ha generado una revolución lingüística en las formas tradicionales de comunicarse textualmente (Crystal, 2001). Por ejemplo, en cierto modo si usted analiza el párrafo anterior, seguramente, si no está habituado a estas nuevas formas de escribir, tardará un poco en reconocer y entender el mensaje que está inscrito. La verdad es que son pocas las palabras que han sido escritas correctamente. En todo el texto aparecen bastantes abreviaciones y signos gráficos para expresar los distintos estados de ánimo del usuario: la felicidad es representada con el emoticón [“:)”] y la vergüenza o lamento con [“¬¬”]. En resumidas cuentas, la persona que escribió este mensaje ha co-creado un lenguaje no convencional para expresar sus ideas en el monitor.
Sin embargo, no se deje llevar por intentar comprender este fenómeno desde valoraciones morales que tienen que ver con una necesidad purista de escribir correctamente. Más bien, lo invito a preguntarse sobre las causas de esta mutación lingüística, es decir, pregúntese por las razones de esta evolución de la escritura en los medios online, o mejor dicho, cuáles son las principales razones por las que Internet ha modificado las maneras tradicionales de comunicación textual.
Algunos autores han mencionado que estas nuevas formas de escribir tienen que ver con una adaptación del lenguaje para suplir los elementos no verbales (López, Fernández y Durán, 2005). Si bien lo sabe, en la mayoría de los chats (de carácter textual) las personas no se manejan con gestos debido a que sólo poseen un teclado para expresar lo que piensan y sienten. Sin embargo, esto no significa que la comunicación no verbal no exista, más bien ahora se expresa por señales que no provienen del cuerpo o del entorno físico. Hoy por hoy, los usuarios utilizan formas distintas para incorporar señales del contexto socioemocional en el mismo lenguaje, como es el caso de los emoticones (Tirado y Gálvez, 2002), de tal modo que las palabras textuales pasan a un primer plano. En muchos de los chats, los observadores sólo se pueden basar en los caracteres escritos para interpretar el mensaje (Wallace, 2001).
A la luz de lo anterior, lo invito a que trate de analizar ya no en términos ortográficos o de redacción, sino en los elementos que producen esta transformación textual. En este caso en particular, el chat se constituye como un medio de comunicación masivo, interactivo e inmediato [1], lo que genera que el estilo de comunicación sea más parecido al referente oral que a los referentes literarios o formales. El lenguaje que se utiliza no pretende sustituir al lenguaje escrito, de alguna manera lo que traslada a la pantalla es el lenguaje oral (López, et al. 2005).
Luis Jaime González Gil
Email: luisjaime@antropomedia.com
Notas
[1] La inmediatez o velocidad de respuesta que se implementa en los chats es uno de los elementos que producen que las personas construyan tantas abreviaciones e ignoren las reglas que regulan el lenguaje (la ortografía y la sintaxis).
Referencias
Crystal, D. (2001). El lenguaje e Internet. Madrid: Cambridge University Press.
Wallace, P. (2001). La psicología del Internet. Barcelona: Paidós.
Galvéz A. y Tirado, F. (2006). Sociabilidad de la pantalla. Un estudio de la interacción en los entornos virtuales. Barcelona: UOC.
López, R., Fernández, F, y Durán A. (2005). La comunicación local por Internet. Universitat Jaume I: Barcelona.
