Las recetas son pura invención metodológica. La mayoría están enmarcadas completamente en el campo del hacer, es decir, de los pasos consecutivos, sistemáticos, dependientes unos de los otros (si no completas el paso 1 no puedes realizar el paso 2) y concretos. Entre ingredientes racionalizados, pasos precisos y técnicas descritas escrupulosamente, es posible detectar que todas las recetas vienen de un pensamiento rápido que tiene la forma de un manual con finalidades pragmáticas.
Desde luego, es raro que un cocinero (o persona que observa la receta) en pleno acto culinario se detenga a reflexionar una serie de abstracciones filosóficas sobre la interacción fuego-comida, o piense acerca de las banalidades meta-teóricas que puede abstraer del uso del cuchillo para explicar las sociedades modernas. Simplemente cuando cocina se convierte por un momento en una especie de zombi, sigue los pasos, nada más. Y si llega a hacer esta clase de preguntas, posiblemente no las formulará en la cocina, sino en su alcoba, cuando ya no está siguiendo instrucciones, sólo pensando cuestiones que van más allá del verbo cocinar.
Sin embargo, si las acciones siempre se quedan en este nivel (el de las meras recetas), lo más seguro es que jamás se recapaciten los actos. Uno reproducirá un manual realizado, hecho en otro contexto y época, sin cuestionarlo o reconocer de dónde vienen estás ideas culinarias. El sujeto que esté cocinando simplemente estará imitando recetas ajenas, y aunque le ponga un poco su toque a la comida, no habrá un cambio o ruptura importante para elaborar algo nuevo e incluso mejor.
Y es aquí donde las recetas, la rentabilidad online y los medios sociales se empalman en este pequeño texto. Al igual que los cocineros-títeres, en muchas agencias o empresas los community managers se encargan simplemente de escribir lo que se les ordena, lo que está en el guion y lo que está en tendencia actual. Para ellos escribir en los medios sociales (Social Media) es una cuestión de seguir recetas, de simple y vana imitación: por eso explotan los MEMES de “ya es viernes”, replican de sobremanera los contenidos ajenos, llenan los perfiles de frases o quotes de autores filosóficos o literarios e impregnan proliferadamente sus publicaciones de noticias sobre el nuevo IPhone, interfaz de usuario y algoritmo de google.
En todo ese escombro de letras lo que queda es repetición, y por ende, una comunicación online del montón que se encarga únicamente de recalcar lo que los demás hacen, o lo que su equipo de comunicación estableció hace ya un par de años.
Entonces ¿cuál es la solución a esto?
Sencillo, pensar de forma inversa: lento.
Pero, ¿qué quiere decir esto?
De nuevo sencillo, tirar las recetas por un momento… esto es construir espacios de investigación y reflexión de insights antropológicos y sociológicos que ocurren en Internet; explorar otras áreas de contenidos para analizar detenidamente si es posible asociarlas con el producto o servicio que se ofrece; estimar la labor del community manager no de manera pasiva, sino como un agente que se está nutriendo diario de lo que ocurre con sus seguidores. En fin, dejar de seguir los patrones, deteniéndose un momento para pensar lento (sin una finalidad a corto plazo) sobre lo que ocurre en los medios sociales en torno al tema que interesa.
Lo dicho no quiere decir que se dejen las cuentas vacías de contenidos, no. Nada de abandonos: se trata de que se utilicen otros recursos (tanto financieros como humanos) para pensar sobre lo que se está haciendo, investigar los usos actuales de los cibernautas, y analizar qué hace, comparte y valora nuestro target en Internet para traducir los esfuerzos de comunicación en rentabilidad. Cuestiones que la estadística no encuentra porque es algo que se debe de comprender con lentitud, y no simplemente contar y transformar rápido.
Respuesta final (y definitiva): La combinación o receta híbrida de Antropomedia para la rentabilidad online es [PL+PR]=RO.
PL= Pensar lento (reflexionar, indagar y crear nuevas recetas)
PR= Pensar rápido (hacer lo que dicen las recetas)
RO= Rentabilidad Online
*Cualquier innovación o variable nueva a la fórmula afirma la idea central: las cosas, recetas o fórmulas se deben de volver a pensar con el paso del tiempo.